Capitulo 3: Al Norte de Francia

Invitado

A la mañana siguiente, Pablo despertó temprano. Se levanto y lo primero que vio fue una bandeja con el desayuno dejada por Prie, el elfo domestico.
Al terminar su desayuno en la cama se vistió y salió de su cuarto, bajo los escalones y se dio cuenta que la puerta de Sirius no estaba cerrada. Ebrio la puerta y al entrar vio a Sirius, aun dormido, roncando como un oso invernando, y con la bandeja del desayuno en la mesita de noche.
- ¡SIRIUS!- grito, quitándole las sabanas de encima.
- ¿Qué?, ¿qué?- pregunto Sirius, medio dormido- ¿dónde esta el fuego?
- No hay ningún fuego, idiota- contesto Pablo, fulminándolo con la mirada.
- Entonces, ¿por qué me despiertas si no hay fuego?- pregunto Sirius, quitándole las sabanas a Pablo, arropándose otra vez.
- Sirius levántate- lo regaño Pablo, quitándole las sabanas otra vez- mira que tenemos que ir nos a buscar al anciano.
- Está bien- contesto Sirius, al fin levantándose de la cama- pero no grites más, que pareces una vieja amargada y arrugada.
Pablo lo miro con cara de pocos amigos, salió de la habitación para que Sirius se cambiara y desayunara tranquilo, mientras el iba a darle algunas indicaciones a Prie antes de partir.
Al terminar, Sirius tomo su bolso y bajo a la cocina, donde Pablo lo esperaba para partir en busca de su informante.
- Listo- dijo Sirius al llegar a la cocina- lo siento por haber tardado tanto bro, es que no encontraba mis lentes, porque sin ellos no salgo de viaje.
- Si ya me di cuenta, en fin, ya que estas aquí será mejor que nos vayamos ya- dijo Pablo.
- Si, si, si, mejor nos vamos- estuvo de acuerdo Sirius- adiós Prie nos vemos al regreso.
- Y ya sabes Prie, no estamos para nadie y mantén limpia la casa- ordeno Pablo.
- No se preocupen amos- dijo el elfo, haciendo uno reverencia- que el mal este con ustedes y les ilumine el camino.
- Gracias- dijo Pablo, dirigiéndose a la chimenea, agarrando una caja llena de polvos Flu y lanzando un puñado a la chimenea, en la cual apareció un fuego más alto que ellos y un verde esmeralda.
- ¿No deberíamos ir nos por la puerta?- pregunto Sirius, al ver lo que hacia su hermano.
- No, ya que anoche revise el mapa que nos dejo Zeer y vi el punto marcado, que es un bosque hacia el norte de Francia, y cheque otros mapas a ver que casa de mago había a los alrededores para así poder usar la red Flu- explicaba Pablo- y descubrí un hotel de mala muerte, ya que no era muy recomendado en la Guía de turismo para magos, que esta a 8 kilómetros del bosque al cual se supone que tenemos que llegar. Así que le avise al encargado de que llegaríamos y me dijo que si que nos esperaba a los 9 en punto, y gracias a ti solo nos quedan 5 minutos.
- Que dramático eres, como con la red Flu tardáramos horas- ironizo Sirius.
- Bueno mejor vámonos ya- dijo Pablo, dirigiéndose al fuego, parándose dentro de el, y luego grito- “HOTEL MANDARIAN”
Las llamas rugieron, tan potente como un león, y el fuego se elevo lo más alto que podía llegar, un segundo después Pablo ya no estaba en la chimenea.
- Como odio viajar por la red Flu- se quejo Sirius- ¿Qué fue lo que dijo? Ah si, ya me acorde- dijo Sirius tratando de acordarse del nombre del hotel- ups, se me olvidaba- se dirigió al espejo cerca de la chimenea se miro en el, acomodándose un poco el pelo- prepárense francesas porque Sirius esta por llegar- se paro dentro de la chimenea y grito el nombre del hotel, y enseguida volvieron a crecer, envolviéndolo en una especie de aura verde y cálida, que termine un segundo después cuando empezó a girar y girar a través de todas las chimeneas conectadas por la red Flu, y mientras giraba Sirius pensaba cuanto odiaba todo eso y que hubiese preferido un tranquilo viaje al estilo muggle. Segundos después Sirius salía disparado de la chimenea del hotel y aterrizaba en la desgastada alfombra roja del vestíbulo principal.
- Como odio los viajes con polvos Flu- se quejo Sirius, parándose del suelo y limpiándose la camisa que estaba llena de hollín.
- Ya cálmate bro- le dijo Pablo dándole un vaso lleno de jugo de calabaza- ya hable con el encargado y nuestras habitación es la 777.
- Gracias- dijo Sirius, tomando el vaso que le daba Pablo y dando un gran sorbo de jugo- pero creí que el encargado solo nos esperaba para darnos un punto de partida no que nos esperaba para darnos una habitación.
- Si lo se- le contesto Pablo, sentándose en un sillón cerca de la ventana- pero tenemos un pequeño inconveniente.
- ¿Y cual será?- pregunto Sirius, sentándose en frente de su hermano.
Justo cuando Pablo iba a contestarle un rayo cruzo el cielo iluminando todo el vestíbulo con una luz azulada seguida por el particular sonido de un estruendoso trueno. Pablo abrió las cortinas de par en par, dejando ver el horizonte tormentoso de una tormenta negra llena de rayos y una lluvia infernal.
- Por eso- dijo al fin Pablo- el encargado me dijo que es extraño que llueva en esta época del año y que será pasajera, que para mañana el cielo estará tan claro como el agua.
- Está bien- dijo Sirius, con mala cara- pero dudo mucho que una tormenta así sea pasajera y que para mañana estará el cielo tranquilo.
- ¡Oh por dios!, no seas tan pesimista bro- le regaño Pablo- solo tendremos que esperar y espero que el encargado tenga razón, que para mañana la tormenta allá pasado, pero mientras tanto vamos a buscar chocolate caliente, que con una lluvia así es lo mas sabroso que puedes tomar.
- Si tienes razón vamos- coincidió Sirius- pero tan bien busquemos que comer que muero de hambre, sabes como me dejan los viajes con polvos Flu, pero primero vayamos a dejar los bolsos en la habitación.

Tema: Re: Capitulo 3: Al Norte de Francia Dom Jul 27, 2008 6:38 am

Me encanto Abraxas (:

Tema: Re: Capitulo 3: Al Norte de Francia Dom Jul 27, 2008 6:42 am

este esta mejor....jajaja. mas mas

Invitado

q mas qieres? tienes 7 cap y aun m falta postear uno y hasta hay se los dejo! xD!!

» Capitulo 5: De Regreso a Hogwarts
» Capitulo 2: Zeer
» Capitulo 7: En el Cementerio
» Capitulo 1: La Historia
» Capitulo 4: La Carta del Anciano